La tecnología arruinó por completo la vista
La tecnología es genial, siempre y cuando no estorbe. Como aquí: mientras la novia caminaba hacia el altar, una espectadora levantó su iPad para filmar el evento. El resultado: un campo de visión bloqueado y un momento fotográfico perfecto arruinado.
Ironías de la vida: los iPads no son precisamente conocidos por su calidad fotográfica. Un consejo para futuros invitados: mejor confíen las cámaras de alta gama a profesionales, y disfruten del momento en vivo. Así, los recuerdos no solo se guardarán digitalmente, sino que también serán emocionalmente auténticos.
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