Un Tono Inquietante
La preocupación cruzó su rostro. “¿Está todo bien?”, gritó hacia la trastienda, intentando sonar despreocupada. Por un momento, se preguntó si había cometido un error al venir a esta tienda. Quizás debería haber elegido una de las tiendas de aspecto más moderno al otro lado de la ciudad.
El señor Harris respondió rápidamente, pero no de forma convincente. “Sí, sí, enseguida estoy. ¡Solo estoy revisando algo!”. Su tono era apresurado y ligeramente tenso. Aunque intentaba parecer tranquilo, el nerviosismo en su voz lo delataba. Melissa podía sentirlo: algo andaba mal, y el aire a su alrededor comenzó a sentirse más pesado con cada segundo que pasaba.
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