Ella intentó vender el anillo de su ex y el joyero le dijo: “Esto no te pertenece”

Un giro inesperado

Melissa soltó un pequeño suspiro y se apoyó en el mostrador, con los brazos cruzados holgadamente mientras esperaba. Miró por la ventana, esperando que este recado fuera rápido y sencillo: vender un viejo anillo y seguir con su día. Nada de la visita había parecido inusual hasta ahora, pero cuanto más esperaba, más incómoda se sentía. Había un peso en el aire, una sensación de que algo más allá de una tasación rutinaria se estaba desarrollando detrás de la puerta de esa oficina.

No tenía idea de lo que estaba a punto de ser revelado, ninguna pista de que su visita ordinaria la llevaría a algo tan impactante. Lo que comenzó como un intento casual de desprenderse de un recuerdo pronto se convertiría en una revelación que nunca anticipó. Su día, una vez predecible y poco notable, estaba a punto de cambiar en una dirección que no podía haber imaginado. Y desafortunadamente para Melissa, no sería una sorpresa agradable.