Objetivos ambiciosos en el aeropuerto
En un entorno donde la gente normalmente corre de una puerta a otra o se desploma exhausta en las sillas, este viajero ha adoptado un enfoque inesperado para pasar el tiempo. Con una pierna casualmente estirada sobre el mostrador de la aerolínea como un gimnasta experimentado, revisa con calma sus documentos como si nada fuera fuera de lo común. La maleta a su lado y la expresión indiferente no hacen sino realzar el contraste entre su postura atlética y el mundano entorno del aeropuerto.
Ya sea que se esté preparando para un vuelo de larga distancia o simplemente presumiendo de su flexibilidad, este momento captura a la perfección el lado peculiar de la vida pública. Su pose es a la vez impresionante y desconcertante: parte calentamiento de yoga, parte comprobación de la tarjeta de embarque. Es el tipo de imagen que hace que los demás viajeros se detengan y se pregunten si se han perdido el memo sobre la calistenia en medio de la terminal.
