En Dubái, casi cualquier cosa se puede bañar en oro, ¡incluso tu coche! Si tu mansión, tus yates y tu colección de animales exóticos no son suficientes para llamar la atención, un coche chapado en oro seguro que soluciona el problema y te convierte en el centro de todas las miradas.
Claro, puede que el coche dorado y brillante haga que otros conductores se aparten o incluso cause un ligero deslumbramiento. Pero lo único de lo que realmente tienes que preocuparte es de demostrar tu riqueza y tu amor por el lujo en la carretera.
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