James Christian Kimmel, más conocido como el presentador de ¡Jimmy Kimmel Live!, lleva décadas siendo un rostro habitual en el mundo del espectáculo. Humorista, guionista, productor y presentador de televisión, Kimmel no le prestó mucha atención a su peso durante muchos años. Sin embargo, eso cambió en 2010 cuando el Dr. Oz apareció en su programa y expresó su preocupación por su salud. Esta conversación reveladora motivó a Kimmel a tomar medidas y comenzar su camino para perder peso.


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A diferencia de muchos otros que recurren a rutinas de ejercicio tradicionales, Kimmel adoptó un enfoque diferente, uno que algunos podrían considerar extremo. En lugar de ir al gimnasio, se centró en la restricción calórica y el ayuno intermitente. Durante ocho semanas, sobrevivió con una dieta que consistía en dos batidos de proteínas y una pequeña cena diaria, lo que le ayudó rápidamente a perder peso. Finalmente, se estableció en un régimen de 2000 calorías por día, lo que le permitió perder 25 libras (unos 11 kilos). Hoy en día, Kimmel mantiene su peso a través del ayuno intermitente, consumiendo solo 500 calorías dos días a la semana. Si bien sus métodos son poco convencionales, sus resultados hablan por sí solos, demostrando que la pérdida de peso puede lograrse de muchas formas diferentes.

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