Banco de abdominales Iron Lung
Este intimidante banco tenía una manivela, cadenas y pesas unidas a un respaldo que se movía mientras hacías abdominales. ¿La idea? La máquina “asistiría” tus abdominales, añadiendo resistencia para un entrenamiento de core más efectivo. En realidad, parecía algo en lo que Frankenstein se acostaría antes de ser revivido.
La manivela ajustable a menudo se atascaba, atrapando a los usuarios a mitad de la repetición. Las pesas podían balancearse impredeciblemente, y la inclinación era tan pronunciada que convertía los abdominales en actos que desafiaban a la muerte. Puede que trabajara tu core, pero definitivamente también trabajaba tu respuesta al miedo. Pocos lloraron cuando este aparato desapareció de los gimnasios.
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