Cuando el drama de la mordedura de serpiente se vuelve completamente circumpunto
En un giro digno de una película de terror de bajo presupuesto, la guía de “autoayuda” de un tipo para emergencias por veneno implicó una amputación de dedo fallida. ¿Su lógica? “Si la serpiente no quería mi dedo, ¿por qué me mordió allí?”
La respuesta del médico:“Uh, ¿has oído hablar de los antibióticos?”Las radiografías ahora revelan una mano que esencialmente dice: “Nah, estoy bien, solo me perdí en la traducción entre la adrenalina y la biología básica”. Moraleja de la historia: Cuando la naturaleza te dé una mordedura de serpiente, no intentes devolver el apretón de manos. A menos que quieras que tu quiromante te cobre extra por los dedos que faltan.
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