22. Dwight Eisenhower –Puntuación de CI: 131.9
Antes de convertirse en el 34.º presidente de Estados Unidos (1953–1961), Dwight D. Eisenhower distaba mucho de ser un estudiante modelo en West Point. Más centrado en el fútbol americano y el boxeo que en los estudios, acumuló un expediente disciplinario mediocre. Sin embargo, su graduación en 1915 marcó el inicio de una transformación extraordinaria. Al ingresar en el Ejército, Eisenhower captó rápidamente la atención de sus superiores gracias a su mente estratégica y su potencial de liderazgo.
Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, la estrella de Eisenhower ascendió rápidamente. Tras el ataque a Pearl Harbor, fue convocado a Washington, donde elaboró planes de guerra cruciales que ayudaron a derrotar tanto a Japón como a Alemania. Su liderazgo como Comandante Supremo de las Fuerzas Aliadas en Europa y, más tarde, como primer Comandante Supremo de la OTAN, consolidó su reputación como un maestro estratega. Como presidente, Eisenhower desafió las expectativas. Conservador de corazón, amplió, no obstante, la Seguridad Social y defendió proyectos de infraestructura como el Sistema Interestatal de Autopistas. Los historiadores lo consideran ahora uno de los líderes más eficaces de Estados Unidos, un testimonio de hasta dónde pueden llevar la determinación, la adaptabilidad y una habilidad especial para convertir los retos en oportunidades. De cadete con bajo rendimiento a héroe de guerra y querido presidente, la trayectoria de Eisenhower es una clase magistral de reinvención.