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Paranoia

Rebecca sentía que la paranoia se le echaba encima como una sombra sigilosa de la que no podía escapar. La carcomía constantemente, nublándole los pensamientos y haciéndole cuestionar todo: cada mirada, cada conversación, cada silencio prolongado.

Intentaba convencerse de que se lo estaba imaginando, de que simplemente estaba dándole demasiadas vueltas a las cosas. Pero la intranquilidad se aferraba a ella como la ropa mojada a la piel: pesada, fría e imposible de ignorar. Si había esperado que el tiempo le traería claridad, estaba muy equivocada. Bajo la superficie tranquila de su vida cotidiana, algo profundamente inquietante comenzaba a agitarse.