¡Llévame a cuestas!


Un amigo con camisa azul dándote un aventón a caballito, una foto para el recuerdo en la playa. Pero la cosa no quedó ahí… Un desconocido con bici, que estaba mirando el atardecer, pregunta: “¿Me puedo unir?”

¡Y esa simple frase desató una explosión de sonrisas! Gente que no se conocía de nada creando juntos un recuerdo inolvidable.

[tr

]

Un milagro playero que te calienta el alma. Esa actitud de pensar “¿por qué no?” en lugar de “¿por qué habría de ser malo?” es importantísima, ¿eh?

Advertisements
Advertisements