38. La tostadora de mesa
La década de 1950 fue una época de ideas futuristas y aparatos de cocina destinados a facilitar la vida, o al menos a hacerla más entretenida. La tostadora de mesa fue una idea audaz: integrar una tostadora en la superficie de la mesa del comedor, para que pudieras meter pan mientras charlabas con la familia o los invitados, sin necesidad de levantarte de la mesa.
Sin embargo, la practicidad fue claramente una idea secundaria. La tostadora a menudo se sobrecalentaba o emitía chispas peligrosamente cerca del mantel, causando humo ocasional y desenchufes frenéticos durante las comidas. También hacía que la limpieza de las migas fuera una tarea incómoda. Las cenas familiares se convirtieron rápidamente en simulacros de incendio. Aunque la tostadora fue un intento peculiar de multitarea, demostró que algunas invenciones es mejor mantenerlas separadas, y que quizás el desayuno pertenece a la cocina, no debajo de tu elegante mantel.