Las mujeres utilizaban un desinfectante como método anticonceptivo
A principios del siglo XX, cuando la anticoncepción era ilegal en Estados Unidos, algunas mujeres recurrieron a métodos desesperados y peligrosos. Uno de los más impactantes consistía en utilizar Lysol —sí, el desinfectante doméstico— como producto de higiene íntima y para prevenir embarazos.
Presentado como una solución milagrosa, Lysol era todo menos inofensivo. Sus productos químicos agresivos provocaban quemaduras e infecciones, lo que demuestra lo peligrosamente engañosa que podía ser la publicidad.
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