Un perro que no deja de ladrar incluso después de que una familia se muda a una casa nueva

Explorando el sótano de la casa

Después de prácticamente arrastrar a Scout fuera de la sala de estar, los dos intentaron bajar las escaleras hacia el sótano. Scout todavía parecía un poco perturbado por lo que había visto en la sala de estar y no quería seguir. James dijo que el secreto del hedor podría estar en el sótano, y Mandy estuvo de acuerdo. Así que los dos bajaron las escaleras con linternas en un intento de resolver el misterio.

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Las escaleras eran viejas y gemían con cada paso que daban Mandy y James. Las tablas de madera eran viejas, pero nunca parecieron estar a punto de romperse.